Seguidores

9 de diciembre de 2010

3MSC ♥

-Las cosas se han puesto muy difíciles para nosotros. Me encantaría estar muy lejos contigo, sin que hubiera más problemas, sin mis padres, sin todos estos líos, en un lugar tranquilo, fuera del tiempo. 
-No te preocupes. Yo sé adónde podemos ir, nadie nos molestará. Hemos estado ya muchas veces, basta quererlo. 
-¿Adónde? 
-Tres metros sobre el cielo, donde viven los enamorados. 





 Prácticamente, ¿cuántas veces se ha roto este mes? 

- Cuatro. 
- De verdad, no sabes mantener una moto. 
- No es eso, yo la hago correr al máximo. No soy como tú, que desde que te has enamorado no piensas más en las carreras. Porque, ¿te has enamorado verdad? ¿No piensas siempre en ella? ¿No estás esperando la hora en la que ella te llame? ¿No te late con fuerza el corazón cuando la ves? 
- Sí. Sí que estoy enamorado. 




-Me da miedo decir algo equivocado...
Te amo.
-Vuelvelo a decir.
-Te amo.
-Nunca dejes de decirlo.
-Te amo,te amo,te amo.
-Nunca habia sido tan feliz en toda mi vida.
-Yo tampoco.
-Tan feliz como para tocar el cielo con un dedo?
-No,muchos mas,al menos tres metros sobre el cielo.







+Puede que nos veamos otra vez. Veo que tienes argumentos muy interesantes...
-Te he dicho ya que eres un cerdo?
+Si creo que si... Entonces, paso a recogerte mañana por la noche.
-No podría. Creo que no podría resistir otra noche como esta.
+¿Porque, no te has divertido?
-¡Muchísimo! Yo hago siempre la camomila, todas las noches. Procuro que la policía me persiga durante un rato, me arrojo de la moto en medio de un campo desconocido, me dejo perseguir por un perro rabioso y, para acabar, me tiro sobre un monton de estiércol. Luego me revuelvo un poco en él y a continuación regreso a casa en sostén y bragas. 
+Con mi cazadora encima.
-Ah, claro, lo olvidaba.
+Y, sobretodo, no me has dicho una cosa. 
-¿Qué?
+Que has hecho todo esto conmigo.








A 200 por hora , no quieres enterarte
 lo que pasa a tu alrededor, 
pero derrepente, aparece alguien 
que dice que aflojes, y cuando aflojas,
 te das cuenta de las cosas.















Es hora de volver a casa. Es hora de volver a empezar, lentamente, sin dar demasiadas sacudidas al motor. Sin darle demasiadas vueltas. Con una única pregunta: ¿Volveré a estar alguna vez allí arriba, en ese lugar tan difícil de alcanzar? Allí, donde todo resulta más hermoso. Desgraciadamente, en ese mismo instante, ya sabe la respuesta.




No hay comentarios:

Publicar un comentario